Día 7. Padre para Chile
Te invitamos a ponerte en presencia de Dios, haciendo la señal de la Cruz
Lee el Evangelio de Juan 14; 1-9.
Reflexionemos con las siguientes preguntas:
¿De qué manera el Padre Hurtado ha sido un Padre para Chile?
¿Cómo se ha manifestado en mi vida la paternidad de Dios?
¿Qué rasgos de la paternidad de Dios me siento llamado a vivir?
Oremos juntos por la siguiente intención:
San Alberto Hurtado, hoy te pedimos por todo el pueblo chileno, por quienes sueñas y luchan por un país mejor, más justo y solidario, seguidores de tus ideales. Ayúdanos a hacer hoy de Chile un hogar para Cristo, donde podamos vivir como verdaderos hermanos y hermanas.
Cerramos con la oración del Padre Hurtado
PADRE ALBERTO HURTADO
Apóstol de Jesucristo,
servidor de los pobres,
amigo de los niños
y maestro de juventudes,
bendecimos a nuestro Dios
por tu paso entre nosotros.
Tú supiste amar y servir.
Tú fuiste profeta de la justicia
y refugio de los más desamparados.
Tú construiste con amor
un hogar para acoger a Cristo.
Como un verdadero padre,
tú nos llamas a vivir la fe
comprometida, consecuente y solidaria.
Tú nos guías con entusiasmo
en el seguimiento del Maestro.
Tú nos conduces al Salvador
que nuestro mundo necesita.
Haznos vivir siempre contentos
aun en medio de las dificultades.
Haz que sepamos vencer el egoísmo
y entregar nuestra vida a los hermanos.
PADRE HURTADO,
HIJO DE MARÍA Y DE LA IGLESIA,
AMIGO DE DIOS Y DE LOS HOMBRES,
RUEGA POR TODOS NOSOTROS.
Amén.