La sabiduría ineludible del Padre Hurtado, su coherencia transformadora, su profundo sentido social y de justicia han hecho de él un personaje histórico para Chile. Su mensaje se ha instalado en temas de contingencia nacional y en debates sociales de gran envergadura.
Tan actual es su legado, que anoche en “Cultura Verdadera de La Red, el programa dedicó el capítulo completo a la vida, obra y legado de nuestro Santo. El conductor de televisión Ignacio Franzani, junto a un destacado panel conformado por Bernardita Correa, Directora Ejecutiva de la Fundación Padre Hurtado; María Alicia Cabezas, protagonista del primer milagro del Padre Hurtado; el Padre Samuel Fernández, ex director del Centro de Investigación Alberto Hurtado; Julio Pinto, Premio Nacional de Historia 2016 y Fernando Montes Sj. ex rector de la Universidad Alberto Hurtado, hicieron un recorrido por el maravilloso camino que transitó el Padre Hurtado.
Durante la conversación, los invitados cuentan que el Padre Hurtado tenía una pasión desbordante y una tremenda profundidad de vida, planteó temas potentes para la época, le preocupaba que la estructura social fuera coherente con la realidad. Julio Pinto explicó que “le dio importancia al Derecho Social en una época donde no había protección ni regulación alguna en el ámbito laboral”.
El Padre Samuel, hablando de la vida espiritual del Padre Hurtado, dijo que “él nos enseña que seguir a Jesús nos lanza a un horizonte más amplio, del bien común” y respecto a su camino hacia la Santidad el Padre Montes plantea que “lo fundamental para ser Santo es la coherencia de vida, si es un servidor de Cristo, más allá de los milagros. Él tenía notable virtudes”. En la misma línea, todos coinciden en que el Padre Hurtado representa a la Iglesia que más nos gusta.
En el cierre del programa, el Padre Montes cuenta que para él el milagro de los milagros es que fue un hombre absolutamente apasionado por Jesucristo, tremendamente actual, profundamente humano y un modelo extraordinario. “Eso me conmueve hasta el alma, encontró a Dios trabajando, fue un Santo en la acción”, concluyó.
Respecto al valor que nos deja el Padre Alberto Hurtado para el Chile actual, Julio Pinto dice que nos deja su fe y su lucha por un Chile más solidario, más justo, que no se mueve en función de los intereses individuales, que busque una vida en comunidad, en reconocimiento de la humanidad, “es un modelo que ojalá nos inspire más que otros que circulan hoy”, enfatizó el Premio Nacional de Historia.
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